La fotografia submarina o subacuatica

Fotografia submarina

Algunas de las más bellas fotografías que podamos obtener se encuentran bajo el mar. El intenso colorido; el azul eléctrico; la diversidad de la fauna marina, son elementos suficientes como para, con experiencia, conseguir unas fotografías con las que sorprender a cualquiera. A veces pensamos que la fotografía submarina o subacuática es complicada, pero muy al contrario, su dificultad radica básicamente en ser un buen buceador y tener un equipo adecuado. Lo demás es, como en todas las otras categorías de fotografías, cuestión de tiempo, paciencia y una pizca de suerte.

 

El equipo de buceo

Obivamente, primero hay que determinar qué fotografías queremos tomar. Si pretendemos sacar fotografías a poca profundidad un equipo de snorkel nos puede ser suficiente. Pero si lo que buscamos es conseguir fotos de elementos hundidos o del fondo marino, hemos de hacernos con un buen equipo de submarinista.

Y ya ni hablar de la dificultad que entraña el que hemos de ser capaz de mantener el equilibrio o quedarnos mínimamente quietos para captar buenas fotografías en un medio en el que habitualmente no nos movemos. No hay que olvidar tampoco que las inmersiones acuáticas hay que hacerlas en compañía.

Equipo de fotografía

El mayor problema en el agua es la falta de luz y sobre todo la distorsión que produce el agua. Las partículas de plancton, de arena y de otros restos absorben la poca luz que entra en el agua y es por eso que a mayor profundidad menos tonos de rojos y amarillos vemos, quedando mayormente los tonos azules.

Hay tres reglas básicas que permiten solventar en cierta medida estos problemas:

Fotografía submarina– Acercarse lo más posible al elemento a fotografiar

– Usar luz de acompañamiento, artificial. El mejor flash en la fotografía submarina es el de tipo estroboscópico.

– Usar lentes de corto alcance, como macros o grandes angulares.

Existen dos tipos de cámaras que pueden ser usadas bajo el agua: la cámara anfibia, que es bastante compacta y aguanta bajo el agua, o bien, elementos de protección (conocidos como housings) que permiten aislar la cámara de la humedad.

Lo ideal para los más novatos son las cámaras anfibias, de bajo precio, 35 mm. y hasta 7 megapixels que nos pueden servir perfectamente para obtener muy buenas fotografías. Para el que ya es más profesional entonces están las cámaras réflex y luego comprarle la protección adecuada para su marca.

Pequeños trucos

– Es mejor practicar primero con los propios compañeros submarinistas, y cuando nos sintamos sueltos empezar a fotografiar animales y otros objetos marinos.

– Una técnica muy usada en la fotografía submarina o subacuática es el contrapicado; ésto es, fotografiar el objeto desde un nivel más bajo, apuntando hacia arriba.

– En el snorkel se practica mucho la «split-phtography» en la que se obtiene una foto dividida entre una parte acuática y otra aérea. En estos casos hay que tener en cuenta la luz y la distorsión que se produce; por ello, es necesario utilizar un buen filtro. Lo mejor, además, es usar un gran angular en este tipo de fotografía.

El último y más importante consejo es que aparte de que seas buen submarinista y buen fotógrafo, te armes de paciencia. Paciencia, paciencia, y paciencia. Es el principal arma bajo el mar.

Y en breve, con mucha práctica, obtendrás fotografías como éstas que a continuación te mostramos (ver fotos).



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