Loteria de Navidad, fotos de ilusion y alegria
¡87.657, 5 millones de euro!… ese es probablemente uno de los sonidos más típicos de la Navidad. El del 22 de diciembre, el día de la ilusión y el de la alegría, el de la Lotería de Navidad. Todos nos levantamos ya con la cancioncilla de los niños de San Ildefonso dispuestos a ver en cada una de las bolas que caen del famoso bombo nuestro número.
La sonrisa está presente en las caras de todos los que juegan, mientras más de uno ha echado ya sus cuentas de lo que haría en caso de tocar. El mágico bombo empieza a girar y las primeras bolas caen. Pasan lo minutos, y la expectación y la ilusión crecen, pendientes de esa bola que nos cambiará la vida.
Es entonces, cuando después de 2 horas sin perdernos un número, y justo cuando nos hemos levantado para prepararnos un café, sale esa bola. Se forma el revuelo en la sala, el tono de los niños sube, alegres porque han sido ellos los que han repartido los millones, los presentadores casi gritan el número y el lugar donde tocó, y nosotros corremos hacia el salón para ver la bola en la tele y darnos cuenta de que… ¡a fin de cuenta, siempre nos queda la salud!
90.000 bolas y una es la nuestra…
El premio Gordo de Navidad… y nuestra bola dichosa que sigue en el bombo…
Los agraciados, el champán… y la «mare» que nos parió, que un año más seguimos sin oler un euro…
Sí, Sí, mucho Calvo de Navidad, pero ni un pelo de gracia que me hace que no me toque ni una vez…